La mayoría de cosas que creemos o pensamos fueron ideadas por otros. Y está bien, pues la única forma de construir conocimiento valioso es, como decía Newton, parado sobre hombros de gigantes [1]En realidad dijo exactamente: "If I have seen further it is by standing on the shoulders of Giants". Esto sí lo tenía que citar porque es nada menos que Newton, con tremenda expresión de humildad., es decir, edificar sobre bases sólidas construidas por otros. Aún cuando el aporte de uno pueda ser insignificante para el universo, la suma de todos los aportes es más que suficiente.

Muchas veces creemos tanto en las ideas de otros que las asumimos como propias. Por eso decimos más comúnmente “yo creo” o “yo pienso” que “el otro pensaba o creía”. De hecho decimos lo segundo cuando no estamos de acuerdo, como tomando distancia.

Yo era de la idea de tratar de citar lo que dijo otro cada vez que fuera posible, pues de esa manera le hago honor al creador y humildemente reconozco que no es mío, pero ahora entiendo que cuando crees realmente en algo o más aún, estás convencido de eso, tanto que lo puedes explicar con pasión y con tus propias palabras, la idea es tan tuya como la del otro.

Pero además ahora comprendo que quedarse en abrazar una idea de otros como propia no la hace realmente tuya todavía. Pasa a ser de tu propiedad cuando la pones en práctica, de manera coherente, en cada una de tus acciones y todos los días de tu vida (predicar con el ejemplo, le dicen). Propiedad es uso en este caso.

Que una idea sea tuya por supuesto que no implica que seas el único propietario. Las buenas ideas son tan grandes que todos podemos poseerlas; justamente esto es lo que las hace grandes.

Debes conocer, debes predicar, pero sobretodo, debes actuar. Lector, autor, actor. La propiedad va de izquierda a derecha. Tú decides.

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