Creo que aprender a cambiar es una de las habilidades más importantes de la vida. Hacer las cosas del mismo modo que siempre las has hecho o pensar de la misma forma solo va a conseguirte los mismos resultados, que aunque puede que no sean malos, son los únicos que conoces.
Cambiar es parte de nuestra naturaleza: adquirimos conocimientos que nos permiten desempeñarnos cada vez mejor. Por ejemplo, cuando somos bebes, nos comunicamos con sonidos y gestos solamente, pero cuando aprendemos a hablar, enriquecemos nuestra comunicación con palabras. Pasamos de ser seres que comunican cosas simples a otros que pueden explicar cosas mucho más complejas, y así mientras seguimos creciendo (hasta que nuevamente nadie nos entiende).
A pesar de esto, hay una infinidad de cambios que podemos hacer para mejorar, pero que no nos atrevemos a dar el paso porque no conocemos, no entendemos o simplemente nos da miedo (en ese orden de dificultad). Pero son justo estas situaciones, en donde no es tan evidente ni fácil cambiar, las que marcarán la diferencia. Mientras la mayoría solo sigue las tendencias y cambia si cambian ellas (inercia), los pocos que se atreven a adelantar al pelotón, ir más lento que él o simplemente no competir en esa carrera, tendrán la oportunidad de explorar y encontrar, tal vez, un enfoque más interesante para sus vidas.
Los miedos no solo se nos aparecerán al llegar a la bifurcación (sigo igual o tomo el sendero alternativo), sino que seguirán ahí cuando hayamos avanzando por el nuevo camino. Lo paradójico es que también seguirán si seguimos por el camino de siempre, pues nos preguntaremos qué nos podemos haber perdido si íbamos por el otro.
Yo no sé si cambiar constantemente nos deje en un punto completamente distinto o en el mismo punto de inicio, pero en todo caso nos va a dar la oportunidad de mirar y experimentar el mundo desde varios ángulos para elegir con cuál quedarnos.
Dicen que si hoy eres la misma persona que hace 6 meses, no has aprendido nada. Es por esto que lo único de lo que tengo certeza hoy, es que mañana no seré el mismo, pues así lo he decidido.
Empecemos a cambiar de una vez porque las posibilidades son infinitas y pero nuestro tiempo aquí, no.
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