Por: Camila Rojas

Los estudiantes de la carrera de Ingeniería Biomédica de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) y la Universidad Cayetano Heredia (UPCH) han logrado crear una máscara semirrigida de presoterapia con sensores de presión, brindando una solución a los pacientes que han sufrido de quemaduras graves. La invención obtuvo la aprobación como patente de Modelo de Utilidad, otorgada por Indecopi por un periodo de 10 años.

Actualmente en el Perú, no existe ningún tipo de tratamiento que utilice este tipo de máscaras impresas en 3D, por lo cual los pacientes podrán obtener un tratamiento rehabilitador, proporcionándoles la menor cantidad de secuelas. 

Funcionamiento 

“Actualmente, el método para obtener una máscara de presoterapia es sedando a los pacientes que han sufrido algún tipo de quemadura. Nuestra propuesta busca ser no invasiva, ya que, a través del escaneo 3D, no se tiene contacto con el rostro. Así podemos obtener un modelo digital del paciente para luego imprimir la máscara de forma personalizada”, describe Héctor Alegría, estudiante de la carrera de Ingeniería Biomédica de la PUCP  – UPCH. 

Esta máscara ejerce y mide presión en zonas específicas del rostro por medio de galgas extensiométricas, por lo cual es ideal para las quemaduras faciales de segundo y tercer grado.

Los estudiantes de la carrera de Ingeniería Biomédica de la PUCP-UPCH, Hector Alegría Cortéz y Jorge Leiva García, estuvieron buscando maneras de poder ayudar a los pacientes que habían sufrido algún tipo quemadura. Fue en su curso de Fundamentos de Biodiseño en donde estudiaron diversos tratamientos y procedimientos para la rehabilitación de cicatrices. Así nació la idea de “la máscara semirrígida de presoterapia con sensores de presión”, la cual brinda una solución efectiva y no invasiva a los pacientes de quemaduras graves.

“Esta patente es un hito en la carrera de Ingeniería Biomédica PUCP-UPCH, ya que demuestra la capacidad de nuestros estudiantes para crear tecnología hecha en su totalidad en nuestro país. Al protegerla y patentarla, podemos divulgar las capacidades que tenemos para contribuir a la sociedad”, señala el Dr. Benjamín Castañeda, coordinador de la Especialidad de Ingeniería Biomédica PUCP-UPCH.


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