Colombia 

Un perro anciano, Dalhí, pasó parte de su vida deambulando por las calles, buscando comida en los basureros pero su vida historia dio un giro de 180° cuando Henry Ramírez, amante de los animales y voluntario de la Fundación Rescátame, lo llevó a su casa, le dio un hogar temporal y lo conectó con su proyecto “Pasantes de cuatro patas”, la cual es una iniciativa sin fines de lucro que rescata perros y les da la oportunidad de encontrar un hogar a través de “pasantías empresariales”.

El programa, que se creó a finales de 2021, consiste en llevar perros rescatados a compañías para generar encuentros con los empleados, crear un ambiente de esparcimiento y, de paso, dar la posibilidad de que alguien los adopte. Y Dalhí fue uno de los afortunados. A él lo rescataron cerca de un caño, al sur de la capital, donde vivía sucio, desnutrido y enfermo. Después de su recuperación, lo sumaron como pasante, dedicado a generar momentos de alegría, en un centro comercial.

“Fue uno de los perritos más viejitos que tuvimos y personificó a un pasante enfocado en aerolíneas. Era el pasante aviador”, indica Ramírez. Fue la oportunidad de mostrarse como el perro cariñoso que era, ganando el corazón de la familia que lo adoptó. “Este mismo perrito estaba antes comiendo basura. La gente pasaba y no hacía nada, pero se le pone uniforme, dice que es pasante de cuatro patas, le pone un rol simbólico como director de comunicaciones de la felicidad y se genera algo mágico”, agrega.

Sin embargo, lamentablemente el caso de Dalhí no refleja la suerte de la mayoría de animales callejeros. Según el Instituto Distrital de Protección Animal (Idpyba) señalan que en Bogotá hay 903.573 perros (casi uno por cada 10 habitantes), de los cuales 90.000 están en las calles

En estas cifras también se incluyen a los perros que tienen dueño pero no son responsables de ellos. El cálculo de la Organización Panamericana de la Salud es que por cada 100 perros con hogar, 38 permanecen en las calles. Dado esto, el Idpyba indició qued se iba a realizar un censo para ajustar la base de datos y recolectar información acerca de ello. 

¿Qué opinan las empresas acerca del acompañamiento de los perros?

Cristina Manosalva trabaja en una empresa de publicidad e indica que el ambiente cambia cuando asisten los “pasantes de cuatro patas”, ya que, según su perspectiva, los empleados disfrutan el momento y son pura risa. Agrega que la labor de los perritos trae beneficios a la organización, puesto que ayuda a la integración de los compañeros. 

“La adrenalina del día a día se baja y se cambia por un momento de endorfinas. Maravilloso”, menciona Cristina. 

Para lograr que los canes puedan asistir a las empresas, estas solo deben aportar para su manutención. 

Que se pueda provocar esto es un ambiente laboral es muy positivo, ya que según la consultora Plurum, en 2019, el 80 % de la población laboral se sentía infeliz en su lugar de trabajo. Cifras que definitivamente han aumentado tras la pandemia. 

Por ello, para el empleado este tipo de actividades le agradan, dado que lo toman como un momento de relajación y esparcimiento.  “El perrito comienza a conocer las áreas de la oficina y todo el mundo busca consentirlo, lleva galletitas y se toman fotos como si fuera un famoso y lo publican en sus redes”, dice Cristina.

Los animales no son “simples mascotas” 

El psicólogo y experto en biología del comportamiento Juan Pablo Páez destaca que el acercamiento a los animales en casa también contribuye a la salud física y mental, especialmente para quienes padecen condiciones como la obesidad por sedentarismo y depresión. En estos casos, se aplica la terapia de activación conductual, incluyendo el movimiento y la motricidad. “El hecho de que tenga a mi perro y me ayude o me obligue a salir de la casa, porque tengo que sacarlo al parque, significa un paso, en especial para salir de enfermedades como la depresión”, indicó.

En definitiva, la vida es un constante estrés, pero siempre encontramos la paz y felicidad en nuestros compañeros de cuatro patas. Henry RamÍrez finaliza diciendo que: “Estamos haciendo algo diferente con esta iniciativa, porque no son los animales de los empleados, sino que son los animalitos que han estado en la calle, expuestos a muchas cosas y, por supuesto, eso mueve corazones. Eso ayuda muchísimo a que la gente sea más consciente y se note la aceptación”.